Cuando era pequeño, jugaba en el arroyo que se encontraba cerca de mi primera casa. El arroyo de agua traslúcida estaba entre las montañas, un día decidí caminar río arriba, intentando encontrar el comienzo del arroyo. Nunca llegué.
Hace un par de años, comencé a cuestionarme sobre mi origen como ser humano, así que decidí regresar a aquel lugar y comenzar un viaje para internarme en el paisaje y conocer una manera distinta de ver el mundo.